Comienza la temporada de buscar ropa
fresquita pa'l veranito, lo cual implica eternas mañanas por el centro con mi madre entrando en absolutamente todas las tiendas habidas y por haber.
Yo soy la clase de fémina (rara avis al parecer) a la que no le gusta ir de compras, de hecho, me aburre mortalmente. Es más fácil encontrarme sentada en el "sofá de los maridos" que rebuscando entre la montaña de camisetas mezcladas de Zara en busca de una talla exacta. Para eso tengo a mi madre, para que indague por mi, cual ave carroñera. Vale que a veces nuestros gustos distan bastante, pero normalmente suele acertar, y tiene una habilidad innata a la hora de encontrar prendas favorecedoras.
Pero hay algo que todas las madres comparten por muy estupendas que sean, y es su extraña relación con los probadores y hacer que sus hijos lo pasen mal. Mi madre tiene dos modos predilectos:
Modo 1 o "Abro la cortina porque sí":
En el momento en el que yo esté semi-desnuda, con una prenda pasando por la cabeza o intentando meterme en un pantalón mi madre abrirá la cortina del probador de par en par dejando a la vista de todo el mundo mis preciosas lorzas. Después de mi enfado mi madre contestará con la siguientes frases: "Qué más da...si no te está viendo nadie", "No van a ver nada que no hayan visto antes" o "¿¡Qué dices!?¡Si no he tocado la cortina casi!"
Modo 2 o "Te abandono aquí y me largo":
Al segundo de darme una prenda para que me pruebe se marchará sin avisar y me dejará hablando sola durante cinco minutos, hasta que al asomar la cabeza por el probador me dé cuenta de que no está y la gente de fuera me mire como si estuviera loca. Aparecerá al cabo de media hora pidiéndome que me vuelva a probar todo porque ella no estaba delante para ver cómo me quedaba. En ese momento usará el modo 1.
También existe un tercer modo, en el que ella encuentra algo que le gusta y se mete en el apretado probador conmigo o me echa al pasillo con el jersey del revés y una zapatilla en la mano, pero ese no me suele dejar humillada, solo desorientada.
De momento he salido victoriosa, con ropa que me gusta y mi dignidad bastante intacta, aunque... ¿os he comentado que todavía sigo buscando un vestido para la boda de mi hermana?
The season for "look for fresh clothes for summer" has began, which involves never-ending mornings downtown shopping with my mom.
I am the kind of girl (apparently rara avis) who doesn't like going shopping, in fact, it bores me to death. It's easier to find me sitting on the "husband-couch" than looking for an exact size on the messy mountain of T-Shirts from Zara. That's why I go my mother, so she can fly around like an scavenger bird. Sometimes we don't agree on some clothes, but usually she finds nice things and she has an incredible talent to find becoming garments.
But no matter how good they are, all the mothers have something in common, their strange relationship with the fitting rooms and getting their kids embarrassed. My mom has two favourite manners:
Fist manner aka "I open the curtain because I want to":
The exact moment I'm half-naked or with a clothe stuccoed on my head my mom will open completely the curtain of the fitting room showing my rolls of fat to the world. After my madness she will answer with one of this phrases: "Why do you care? No one's looking!", "They're not going to see anything they haven't seen before" or "What are you talking about?! I barely touched the curtain!".
Second manner aka "I leave you here and go far away":
The second she gives me a garment she will go away saying nothing and leaving me talking alone until the moment I show my head through the curtains to realize that she's not there and that a bunch of people is calling me crazy. She will come an hour later asking me to try on again all the clothes because she wasn't there. Then she will use the first manner again.
There's also a third manner, in which she finds something she likes and come in the small fitting room with me or kicks me out from there. But that doesn't embarrassed me, that just disorientate me.
By the moment I've been victorious and bought a lot with my dignity untouched, although…have I told you i'm still looking for my sister's wedding dress?